ARCHIVO DIGITAL "J. R. SAIZ VIADERO"

1980 Don Fernando de los Ríos, segundo Hijo Adoptivo de Santander : Una representación de nuestro Ayuntamiento asistió el sábado al traslado de sus restos al cementerio civil de La Almudena / J. R. Saiz Viadero. Santander, Hoja del Lunes, 30 de junio de 1980. Página 12. TEXTO: El sábado 28, a las 4,30 de la tarde, habrá contemplado el concejal del Ayuntamiento de Santander Pedro Vallejo Vélez, el reposo final de los restos de su compañero Fernando de los Ríos Urruti, catedrático y ministro de Instrucción...

1980 Mamá grande y su tiempo : un relato que enlaza el Santander fin de siglo con San Luis de Potosí, su ciudad gemela en México / Manuel de la Escalera (Manuel Amblard). Ilustraciones Manuel Calvo.  Santander, J. R. Saiz Viadero (Puntal Libros), 1980. (Artes Gráficas Bedia). 114 páginas ; 22 cm. Notas: Edición de 1.000 ejemplares numerados. D.L.: SA 69-1980 ISBN: 84-85623-01-0 SINOPSIS: Entre las vicisitudes de la clandestinidad y la monotonía de un largo encarcelamiento, un viejo luchador político recuerda su infancia. Nacido a fines de siglo en San Luis de Potosí, una ciudad mexicana, ahora «gemela» de la nuestra, tras un largo viaje trasatlántico de los de entonces, a los seis años, desembarca en un Santander invernizo, lluvioso y triste. Con la llegada de la primavera y el verano -cambios estacionales que en el México tropical son casi imperceptibles- ve como la ciudad se transforma. Nos habla del tren de Pombo, las playas con bañeros y las ferias de la Alameda de Oviedo. Az

  1980 Los 75 años del acorazado Potemkim, desde Santander : La película más conocida y perseguida inmortalizó el suceso... / J. R. Saiz Viadero. Santander, Hoja del lunes, 23 de junio de 1980. Página 17. TEXTO: El 12 de junio de 1905 se producía en Rusia una sublevación obrera y campesina que, aún siendo dominada por la administración zarista, dejará recuerdo en las mentes y servirá de antesala para la Revolución de Octubre de 1917. Veinte años más tarde, en pleno...

  1980 Sin mala intención / Juan G. Bedoya. Santander, Hoja del Lunes, 9 de junio de 1980. Página última. TEXTO: Ramón Viadero suele decir que el emperador Nerón no quemaba Roma por el placer estético de contemplar el fuego, sino porque el muy pillastre pensaba dedicarse a la construcción. No podía ser de otra manera: donde no hay ética...